¿Existe la música afrodisíaca?

Muchos estudios han demostrado que la música sí puede llegar a tener un efecto afrodisíaco y así aplicar un aumento del deseo sexual.

Promoviendo el ambiente para finalmente desencadenar el tan deseado encuentro. Según varios especialistas, es un factor determinante a nivel de terapia para lograr la plenitud del erotismo a nivel sensorial. Ya que da una especie de “color” a los encuentros e influye directamente en nuestra psiquis.

Es decir, con un buen fondo musical y la compañía adecuada, podemos transportarnos directamente a los escenarios más fogosos.

La música, al igual que los alimentos afrodisíacos, es uno de los afrodisíacos más potentes que logra desconectar hasta al más estresado de los seres humanos.

¿Existe la música afrodisíaca?

El oído juega un papel importante en el despertar del deseo sexual, con esto no sólo nos referimos a la música, sino también a las palabras.

El diálogo que mantenemos durante el sexo es parte importante de la excitación de la persona. ¿Pero cómo la música puede tener el mismo efecto?

Quizás no con la misma intensidad que las palabras de la otra persona, pero vaya que sí influye en la evolución del momento.

Puede que influya un poco más en las mujeres que en los hombres. Esto debido a que los hombres somos más “visuales” y las mujeres suelen ser hechizadas a través de los oídos.

¿Sirve algún género musical en particular para despertar esa pasión e intensidad el momento? Pues si bien no hay un estándar sobre los efectos afrodisíacos de la música,  se sabe que obviamente no funcionará con heavy metal ni nada por el estilo.

Se puede recurrir a temas plasmados con romanticismo y poco a poco ir subiendo el tono. En este caso salen a relucir el jazz, las baladas, el blues y hasta el tango argentino.

Por supuesto, esto variará según la edad, las preferencias musicales, las experiencias vividas y los gustos de cada persona. Por ejemplo, si es una pareja rockera, pues probablemente sus momentos íntimos iniciarán con sus pistas favoritas de rock.

Un acompañamiento de momentos de pasión

Si bien no genera efectos afrodisíacos inmediatos, la música sí que ayuda a ambientar la situación para ir subiendo el tono.

¿Qué queremos decir con esto? Que obviamente no por colocar ciertas canciones el deseo sexual aumentará, pero si es un buen detalle para iniciar besando a tu pareja.

Muchos sexólogos están de acuerdo en el hecho de que a través de la música se llega a un estado de éxtasis más profundo.

Esto producto de la desconexión que provoca la música en nuestra mente. Dejándonos abiertos a sentir con mayor intensidad la pasión y la intensidad del momento con la música y sus efectos afrodisíacos.

Ahora, por supuesto que esto depende, ya que podría o no funcionar dependiendo de las personas. Por ejemplo, algunas parejas prescinden de los afrodisíacos ya que sólo necesitan de su propia pasión para el momento.

Pero no cabe duda de que un buen soundtrack de fondo y unas manos hidratadas dispuestas a masajear son afrodisíacos muy potentes. Puede llegar a ser la clave de un preámbulo espectacular para el juego amoroso.

Dependiendo del tipo de encuentro, debes saber variar entre los tipos de música. Por ejemplo, si es una cita romántica o por el contrario un escape alocado, debes saber qué música va acorde al momento.

Aunque repetimos, todo es cuestión de gustos, ya que sólo ustedes sabrán qué es lo que les gusta.

¿Iniciar la noche con unas suaves melodías románticas y terminar con un concierto de los rolling stones? Todo es válido en el amor y en la guerra, como se dice por ahí.