El Trastorno Obsesivo Compulsivo puede presentar un problema grave para el desarrollo de la vida de una persona. Más aún, cuando se presentan síntomas y no se busca ayuda. Sin embargo, estos no son tan fáciles de detectar sin la ayuda de un experto. Ésto se debe a que los comportamientos que suelen indicar que se padece este trastorno, pueden ser vistos como comunes por los demás.
Esta enfermedad se caracteriza por realizar acciones o tareas para mantenerse ocupado y alejarse de los pensamientos que le producen ansiedad. Estas actividades son llamadas compulsiones que poco a poco van agotando el tiempo y la energía de la persona que las padece.
La mayoría de las personas asocian esta enfermedad con las personas fanáticas de la limpieza, pero existen muchos otros comportamientos que pueden presentarse. A continuación tenemos los principales síntomas que presentan las personas con el Trastorno Obsesivo Compulsivo.
Índice de contenidos
Los principales síntomas del TOC
Pensamientos Obsesivos
Están presentes en casi todas las personas que sufren este trastorno. Estos pensamientos son aquellos que invaden la mente del individuo y causan grandes niveles de ansiedad, estrés y temor. Sin embargo, se trata en sí de pensamientos irreales que frecuentan a la persona. Estas preocupaciones por lo general ya han sido resueltas pero la persona no puede evitar seguir pensando en ellas. Estas incluyen preocupaciones por eventos futuros que son inciertos.
Gracias a ellos, las personas se ven en necesidad de buscar una actividad que logre distraerlos. Es así como temporalmente calman sus niveles de ansiedad. No obstante, esta enfermedad se caracteriza por la incapacidad de seguir adelante y afrontar las preocupaciones. Aquellas personas con el Trastorno Obsesivo Compulsivo, se verán plagadas nuevamente por estos pensamientos aun después de realizar una actividad de distracción. No pueden evitarlo.
Aberración hacia la contaminación
Quizás uno de los comportamientos más comunes. Las personas con TOC que se pueden asociar con este comportamiento, suele realizar actividades de limpiezas al extremo. Ésto surge como una respuesta a un pensamiento de peligro a enfermarse por los gérmenes. Las personas son capaces de lavarse las manos hasta que estas estén muy sensibles o incluso hasta el sangrado.
Para estas personas, realizar las “debidas” acciones para disminuir el riesgo de enfermarse es algo que se puede justificar. Su problema es que no reconocen que pueden llegar hasta los extremos, como asegurarse de que la mesa siempre esté limpia, aun después de haberla limpiado 1 hora antes.
Ordenar todo de una manera
Esto se debe a que los individuos buscan una sensación de “satisfacción” al ver que todo está ordenado de la manera en la que se “debe”. Ser una persona ordenada por sí sola no es un síntoma que se asocie con la enfermedad. El problema recae cuando la persona impone un orden en todo tipo de aspecto en su vida.
Todo debe realizarse de una manera específica, de otro modo está mal. Todas las cosas de su casa deben ser ordenadas por color o por tamaño. Estas personas no pueden estar tranquilas si algo en su casa ha sido movido de como estaba.
Acumular cosas que no necesitan
Esto puede ser el síntoma de otro tipo de trastorno, pero es usualmente encontrado en pacientes con Trastorno Obsesivo Compulsivo. Para estos individuos existe un pensamiento recurrente que les impide botar cualquier tipo de objeto. El pensamiento compulsivo relacionado suele ser que algo malo podría pasar si se deshacen de ese objeto. Además de esto, pueden pensar que luego necesitarán el objeto aun cuando no es verdad.
Necesidad de comprobar todo lo que han hecho
Que una persona se asegure de que ha hecho algo, no representa que sufra este trastorno. Lo que indica que es un problema, es cuando se realiza muchas veces. El síntoma puede ser apreciado cuando el individuo no puede parar de comprobar algo, aun cuando ya lo ha hecho incontable veces. Esto se debe a un pensamiento obsesivo de precaución. Las personas pueden asegurarse hasta 50 veces si han cerrado la puerta o han apagado la estufa.
Es importante acotar que estos comportamientos son muy comunes y que no siempre representan que se padece de este trastorno. Usted puede presentar pensamientos recurrentes, realizar algunas de estas actividades y aun así no padecer de TOC. El problema recae cuando estas se realizan una gran cantidad de veces y no se tiene razón para ello. Cuando las tareas empiezan a afectar la vida de la persona, es cuando se tiene un problema. En ese caso sólo se tendría que ir a un experto para que le dé seguridad.
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