Ovarios poliquísticos y fertilidad: ¿son compatibles?

¿Pueden las mujeres con ovarios poliquísticos quedarse embarazadas? ¿Afecta este síndrome conocido como SOP a la fertilidad de quienes desean tener un bebé? La doctora Victoria Verdú nos da las respuestas.

¿Qué es el síndrome de ovario poliquístico o SOP?

El síndrome de ovario poliquístico, conocido como SOP, es uno de los problemas de salud más frecuentes entre las mujeres y puede afectar tanto a adolescentes como a mujeres de mayor edad en estado reproductivo.

De hecho, se estima que una de cada diez mujeres padece esta afección, que da lugar a desequilibrios hormonales y problemas metabólicos perjudiciales tanto para la salud interior como para el aspecto físico.

Por consiguiente, esa inestabilidad hormonal acaba produciendo en la mujer problemas en los ovarios, lo que puede derivar en cambios del ciclo menstrual, quistes en los ovarios, imposibilidad de embarazo y otros problemas de salud.

La edad estimada a la que se diagnostica este trastorno suele situarse entre los 20 y 30 años, momento en el que aparecen ciertas dificultades a la hora de quedarse embarazada y se decide consultar el caso con un médico especialista.

A pesar de que también pueden darse casos en edades fuera de este rango, siempre son posteriores a la pubertad.

La explicación que lo relaciona con los desajustes hormonales sobre los que hablábamos con anterioridad tiene que ver con la alteración del proceso natural del propio ciclo menstrual, ya que, en este caso en concreto, puede darse la situación de que el óvulo no llegue a desarrollarse o desprenderse durante la ovulación como debería suceder.

Esto se traduce, por lo tanto, en periodos de amenorrea o menstruaciones irregulares, lo que a su vez conlleva el desarrollo de los famosos quistes o problemas de infertilidad. Sin duda, uno de los síntomas principales del SOP u ovarios poliquísticos, aunque no se trata del único.

Ante este problema de salud también suele producirse un exceso de acné y vello en diferentes partes del cuerpo localizadas -pecho, rostro, barbilla, etc.-, así como caída del cabello, papilomas cutáneos, aumento de peso o dificultad para perderlo y oscurecimiento de la piel.

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Cómo diagnosticar el SOP

A la hora de diagnosticarlo, además de tener en cuenta esta serie de síntomas, también es importante apoyarse en diferentes pruebas médicas que finalmente valoren y precisen la existencia de este problema de salud. Entre estas pruebas se encuentran:

• Análisis de sangre. Mediante estos análisis se puede llevar a cabo una valoración de los niveles de andrógenos, también conocidos como la “hormona masculina” y con la que se puede justificar la afección del SOP.
• Examen físico. En este caso, el médico pondrá especial atención en la posible aparición de los síntomas más comunes del SOP, como es el exceso de vello y acné, la decoloración de la piel y la caída del cabello. Además, también se llevarán a cabo valoraciones como el índice de masa corporal, la medida de la cintura y se tomará la presión arterial. Por su parte, otro de los indicios relacionados con el SOP se encuentra muy ligado con el ensanchamiento de la glándula tiroides.
• Examen pélvico. Es imprescindible para controlar el tamaño de los ovarios y ver si se encuentran inflamados o con un tamaño más grande lo normal y detectar la posible aparición de hormonas masculinas adicionales.
• Ultrasonido pélvico. Se trata de una prueba realizada con ultrasonido en la que se inspeccionan los ovarios para corroborar la existencia de quistes y comprobar el estado del endometrio.

¿Puedo quedarme embarazada si padezco el síndrome del ovario poliquístico?

Esta es, con diferencia, una de las incógnitas que más preocupan a las mujeres que lo padecen. La respuesta es sí, es posible quedarse embaraza aun teniendo el síndrome de ovario poliquístico.

Esto no implica, en ningún caso, que no puedas quedarte embarazada, aunque sí es cierto que suele ser una de las causas más comunes de infertilidad.

De todas formas, existen diferentes opciones de tratamiento para que el embarazo pueda darse con total normalidad.

Entre estas alternativas, es importante, en primer lugar, controlar el peso corporal, ya que resulta imprescindible para regularizar el ciclo menstrual y mejorar la salud fértil.

Asimismo, la prescripción de medicamentos concretos también puede ayudar a mejorar tanto la regulación menstrual como la propia ovulación, entre los que se encuentran las píldoras anticonceptivas, metformina, clomifeno y letrozol, entre otras opciones.

Sin embargo, en caso de que estos medicamentos no resulten efectivos, se puede valorar también la posibilidad de la fertilización in vitro.

Por último, y solo ante la posible inefectividad de los tratamientos anteriores, la cirugía también puede llegar a plantearse como una opción en las mujeres que tienen ovarios poliquísticos.

En el caso de las mujeres con ovarios poliquísticos, la capa exterior de los ovarios suele presentarse mucho más gruesa que de costumbre, lo que puede llegar a suponer un impedimento frente a ovulación espontánea.

Esta cirugía, por lo tanto, consistiría en la realización de una serie de perforaciones mediante láser o con una aguja muy fina en la superficie del ovario para facilitar la ovulación.

Asimismo, una vez embarazada, es importante ser rigurosos con nuestra propia salud para que la gestación se desarrolle con total normalidad.

En el caso de las mujeres con SOP, se aconseja mantener un peso saludable, alcanzar índices de azúcar en sangre saludable antes de quedarse embarazada y también tomar ácido fólico, previo consentimiento del médico de cabecera.

No olvides que a través de este blog para aprender es posible conocer mejor el síndrome de los ovarios poliquísticos y también averiguar cuántos óvulos tiene una mujer.