¿Qué es el autismo?

El autismo es un trastorno neurológico. Éste se caracteriza complejo ya que quienes lo padecen tienen deficiencias para relacionarse con las personas, así como también deficiencias en las habilidades de lenguaje y comunicación. Dependiendo de cuál sea el tipo de autismo y el nivel en el que la persona lo posee podría tener constantemente episodios de comportamientos rígidos y repetitivos.

La palabra autismo incluye una variedad muy grande de síntomas, es por ello que en la actualidad decidieron que esta condición se debida llamar Espectro Autista (TEA). Éste pasó a cubrir un gran espectro de síntomas, habilidades y también niveles de deterioro. En el mismo varia la gravedad del síndrome que sufre la persona.

Es importante destacar que el autismo podría ser una desventaja que limita a un individuo a continuar con una rutina normal o podría ser una discapacidad que requiera de algún tipo de atención institucional. Todo dependerá del nivel en el que se padece.

¿Qué es el autismo?

Los niños y adultos que padecen de autismo en ocasiones tienen muchas dificultades para comunicarse. Además de graves problemas para lograr comprender lo que otras personas sienten y piensan. Ésta es la principal causa de porque a ellos se les hace sumamente difícil expresarse ya sea mediante palabras, tacto o expresiones faciales.

Un niño que posee autismo es uno que es muy sensible. En ocasiones le podría parecer perturbador e incluso doloroso los sonidos, olores, lugares que para las demás personas son normales.

Los niños que son autistas presentan por lo general movimientos repetitivos. Éstos podrían mecerse por horas o incluso aletear las manos repetitivamente. También, podrían responder inusualmente ante algunas personas, presentar resistencia a los cambios de rutinas, comportarse agresivamente o autolesionarse.

¿Cuándo aparecen los síntomas?

Los síntomas de este síndrome aparecen normalmente durante sus tres primeros años. Sin embargo puede existir la posibilidad de que algunos niños presenten los síntomas desde su nacimiento. Así como también que no presenten síntomas hasta que las demandas del ambiente exceden sus capacidades.

¿Quién puede sufrirlo?

Según los investigadores los niños son más propensos a padecer autismo que las niñas. Este síndrome no conoce fronteras de raza, sociales o incluso étnicas. Sin importar el estilo de vida de las familias, sus niveles educativos o sus ingresos este puede afectarlas de igual manera.

El autismo se dice que está en aumento. Sin embargo, no está del todo claro si el aumento está relacionado con cambios en la forma en que se diagnostica o si se trata de un verdadero aumento en la incidencia de la enfermedad.

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Síndromes TEA

El autismo es sólo un síndrome que ahora cae bajo el epígrafe de trastornos del espectro autista. Los trastornos anteriores que ahora se clasifican bajo el paraguas diagnóstico de TEA o un trastorno de la comunicación social incluyen:

• El trastorno autista: Esto es lo que la mayoría de la gente piensa cuando oye la palabra “autismo”. Se refiere a problemas con la interacción social, la comunicación y el juego imaginativo en niños menores de 3 años.
• Síndrome de Asperger: Estos niños no tienen un problema con el lenguaje. De hecho, tienden a marcar en el rango promedio o por encima del promedio en las pruebas de inteligencia. Pero tienen los mismos problemas sociales y el alcance limitado de intereses como los niños con trastorno autista. Este se podría decir que es un autismo leve.
• Trastorno generalizado del desarrollo o PDD: también conocido como autismo atípico. Se trata de una especie de cajón de sastre para niños que tienen algunos comportamientos autistas pero que no encajan en otras categorías.
• Trastorno desintegrativo infantil: Estos niños se desarrollan normalmente durante al menos dos años y luego pierden parte o la mayor parte de su comunicación y habilidades sociales. Este es un trastorno extremadamente raro y su existencia como una condición independiente es una cuestión de debate entre los muchos profesionales de la salud mental.

¿Qué causa el autismo?

Debido al hecho de que el autismo podría darse en cualquier familia, la mayoría de los que han investigado este síndrome coinciden en que tal vez una combinación de genes podrían predisponer a un niño a padecerlo. Sin embargo, existen varios factores que aumentan las posibilidades de que un infante pueda nacer con autismo, por ejemplo:

• La edad avanzada de los padres podrían aumentar las probabilidades de que un niño sea autista.
• Si una mujer está embarazada y empieza a consumir ciertos fármacos o sustancias químicas muy potentes podría aumentar las posibilidades de que su hijo sea autista.

Exactamente porque el autismo ocurre aun no se sabe. Múltiples investigaciones concluyeron que puede originarse a raíz de anomalías en algunas partes del cerebro que son las encargadas de interpretar la información de lenguaje y sensoriales.